Si tuviese que elegir de entre todas las sagas de SNK mi favorita, seguramente me quedaría con Fatal Fury, porque si bien es cierto que las primeras entregas de la serie no destacaban mucho en materia jugable -aunque sí visual y sonoramente- a partir de la tercera entrega la cosa metió un cambio bastante radical acercándose cada vez más a la forma de jugar de Street Fighter en cuanto a físicas de los personajes, combos y demás mandanga. Así que, mientras que hay gente que prefiere otras sagas más grandilocuentes que todavía siguen vivas como King of fighters o diferentes como Samurai Shodown, yo me quedo con la de los hermanos Bogart porque su estilo casa mucho más con mis gustos. Y quizás porque fue a partir de la tercera entrega que este cambio jugable fue más palpable que ésta se trata, de entre todas, de mi favorita, a lo que se le une, además, el gran trabajo que se realizó en lo visual con este juego, con un mimo increíble en cada uno de los elementos del juego así como en su perfecta banda sonora, que llega, por momentos, a ser totalmente épica.
Gráficamente el trabajo de SNK con este capítulo de la saga fue digno de elogio, no es ya que se plantase con algunos de los escenarios más detallados, míticos y emblemáticos de la saga y que, encima, le iban al dedillo a cada uno de los personajes a los que pertenecían, o que las animaciones de cada uno de los diez personajes elegibles tuviese un buen aumento de animaciones respecto a los anteriores tres capítulos (o dos y medio, dependiendo dónde se quiera meter a FF Special), si no que todo lo que rodeaba al esqueleto básico del juego había sido trabajado al máximo: La intro, corta y espectacular, la pantalla de selección de personajes, la de selección de escenario, el desplazamiento por el mapa, las conversas de los personajes antes y después de cada combate, pantalla de opciones...Incluso la pantalla de carga si tenemos una de las versiones en CD del juego es mona. A día de hoy todavía creo que muchos de los escenarios de esta tercera entrega superan a los capítulos venideros de la saga, que al igual que en otros episodios presentaban cambios en la hora del día entre rounds para mostrar mejor el paso del tiempo durante el combate, variando por tanto, la paleta de colores de todo el escenario y algunos elementos en él.
Y sin duda alguna, grande fue también el trabajo realizado por SNK en el apartado sonoro del juego, con una banda sonora de lo más exquisita y variada y de la que disponemos dos versiones diferente: Una, pertenenciente a la versión Arcade y AES del juego, realizada con el propio chip de sonido del hardware y otra, para las versiones CD -esto es, Neo Geo CD y Sega Saturn- que reinterpreta los temas en calidad CD. Si ya la versión en cartucho del juego tiene una buena banda sonora, la versión CD es una auténtica genialidad ganando una cantidad de enteros que hace explotar el marcador de puntuación. Si los temas de escenarios como el de Mai Shiranui, Blue Mary o Franco Bash ya son buenos en su versión original, la remasterización hace que ganen enteros de una forma exagerada y que sean puro deleite en nuestros oídos.
Argumentalmente nos encontramos con una vuelta a los orígenes en toda regla, abandonando los derroteros del campeonato mundial que vimos en la segunda entrega en su absurdo intento de copiar a Street Fighter y que tan mal sentaba a Fatal Fury para regresar a South Town, la ciudad donde tuvo lugar la primera entrega de la saga. Así, volvemos a visitar viejos escenarios -casi irreconocibles- como Sound Beach, Pao Pao Cafe o la torre de Geese Howard, el malo maloso del primer juego y que, todavía, sigue vivo el muy puñetero. Hay que destacar que el juego en todas sus versiones cuenta con selector de idioma, estando entre ellos el castellano, así que, siendo un título de SNK tenemos dos géneros en uno: La lucha y el de los puzles, por aquello de resolver qué narices nos están diciendo los personajes gracias a las hilarantes traducciones googlerianas que hacía la compañía por aquella época. Siendo un juego de lucha no es que su trama tenga un especial peso para el desarrollo del juego, pero sí es de agradecer el mimo que SNK puso en esta entrega, hilvanando y encajando todos los combates en una búsqueda para unos pergaminos ancestrales que sólo puede obtener el mejor luchador o algo así, no sé.
Y es en la forma de jugar donde Fatal Fury mete un subidón de calidad de aúpa, pasando de la jugabilidad más acartonada y rígida de los anteriores títulos a un estilo de juego mucho más fluido y orgánico. Los personajes se mueven con mucha más soltura por la pantalla, responden mejor, sus ataques se realizan con más facilidad y en general el lavado de cara gráfico les sienta de maravilla, ganando todos en sus sprites mucha más contundencia y presencia. Además, la saga presenta una novedad y es que los dos planos de juego que eran seña de identidad de la saga se modifican para pasar a tres planos, uno central, uno interior y otro exterior a los que se puede pasar momentáneamente para esquivar ataques y contraatacar. La permanencia en estos planos, además, se limita en el tiempo y ya no podemos pasar en ellos todo el rato que queramos como en los anteriores capítulos, así, al poco de cambiar de disposición nuestro personaje volverá a la central. Este simple cambio hace que el juego gane una profundidad de la que carecían los anteriores añadiendo la estrategia y el juego mental de ¿Cúando cambiar de plano?¿Cuándo esquivar?¿Cuando contraatacar? Para no hacer estos cambios de plano totalmente gratuitos, además, cada luchador cuenta con golpes que pueden devolver al rival al plano central de juego haciendo que la huida y esquiva no sea totalmente gratuita si no algo que hay que saber realizar en el momento apropiado. Además, esta entrega incluye otras novedades como la valoración de cada uno de los combates que realicemos que repercutirá en si vemos el verdadero final o no o el poder realizar dependiendo de nuestra posición en el escenario unos pequeños fatalities al ejecutar el último golpe al rival, enviándolo al agua, contra la pared o, lo más espectacular, enviándolo hacia la pantalla en un zoom como los que Neo Geo sabía realizar.
Fatal Fury 3 es el punto de inflexión de la saga, de cuando los juegos de la serie pasaron de ser títulos nomalitos y basados en rutinas aburridas para vencer al contrario a ser divertidos, dinámicos y fluidos con muchas más opciones de combate y más profundidad. Independientemente de esto, Fatal Fury 3 es, además, el capítulo que presenta mejor apartado artístico de toda la saga, escenarios muy cuidados y que rebosan preciosimo y detallismo al máximo, personajes grandes y robustos, gran presentación del juego y todo coronado por una banda sonora genial. Cualquier fan de la saga debiera tener, sin lugar a dudas una copia de Fatal fury 3 en su colección.
Lo mejor:
-Presentación y apartado gráfico, muy cuidado y detallado, le da mil vueltas a las anteriores entregas de la saga, que ya eran, de por sí, bastante vistosas.
-La jugabilidad está muy mejorada, ha metido un subidón respecto a entregas anteriores, gracias a la mejor animación y fluidez y a la modificación de los diferentes planos de lucha, que lo hacen más rápido y estratégico.
-La banda sonora, sea en cartucho o en versión CD.
-La forma de narrar la historia y el incentivo de tener varios finales dependiendo de nuestra habilidad.
-Es un juego de Neo Geo bastante asequible, sea el formato en el que sea.
Lo peor:
-Como venía siendo costumbre en SNK, su traducción al castellano deja que desear.
-Los tiempos de carga pueden hacerse algo pesados.
-El cabrón de Hon-Fu se me atraganta más que el jefe final.
-Que la versión de Sega Saturn no saliese en Occidente y que, además, la versión japonesa dé problemas de compatibilidad si se usa con un ST-Key.
NOTA: 9
Gráficamente el trabajo de SNK con este capítulo de la saga fue digno de elogio, no es ya que se plantase con algunos de los escenarios más detallados, míticos y emblemáticos de la saga y que, encima, le iban al dedillo a cada uno de los personajes a los que pertenecían, o que las animaciones de cada uno de los diez personajes elegibles tuviese un buen aumento de animaciones respecto a los anteriores tres capítulos (o dos y medio, dependiendo dónde se quiera meter a FF Special), si no que todo lo que rodeaba al esqueleto básico del juego había sido trabajado al máximo: La intro, corta y espectacular, la pantalla de selección de personajes, la de selección de escenario, el desplazamiento por el mapa, las conversas de los personajes antes y después de cada combate, pantalla de opciones...Incluso la pantalla de carga si tenemos una de las versiones en CD del juego es mona. A día de hoy todavía creo que muchos de los escenarios de esta tercera entrega superan a los capítulos venideros de la saga, que al igual que en otros episodios presentaban cambios en la hora del día entre rounds para mostrar mejor el paso del tiempo durante el combate, variando por tanto, la paleta de colores de todo el escenario y algunos elementos en él.
Y sin duda alguna, grande fue también el trabajo realizado por SNK en el apartado sonoro del juego, con una banda sonora de lo más exquisita y variada y de la que disponemos dos versiones diferente: Una, pertenenciente a la versión Arcade y AES del juego, realizada con el propio chip de sonido del hardware y otra, para las versiones CD -esto es, Neo Geo CD y Sega Saturn- que reinterpreta los temas en calidad CD. Si ya la versión en cartucho del juego tiene una buena banda sonora, la versión CD es una auténtica genialidad ganando una cantidad de enteros que hace explotar el marcador de puntuación. Si los temas de escenarios como el de Mai Shiranui, Blue Mary o Franco Bash ya son buenos en su versión original, la remasterización hace que ganen enteros de una forma exagerada y que sean puro deleite en nuestros oídos.
Argumentalmente nos encontramos con una vuelta a los orígenes en toda regla, abandonando los derroteros del campeonato mundial que vimos en la segunda entrega en su absurdo intento de copiar a Street Fighter y que tan mal sentaba a Fatal Fury para regresar a South Town, la ciudad donde tuvo lugar la primera entrega de la saga. Así, volvemos a visitar viejos escenarios -casi irreconocibles- como Sound Beach, Pao Pao Cafe o la torre de Geese Howard, el malo maloso del primer juego y que, todavía, sigue vivo el muy puñetero. Hay que destacar que el juego en todas sus versiones cuenta con selector de idioma, estando entre ellos el castellano, así que, siendo un título de SNK tenemos dos géneros en uno: La lucha y el de los puzles, por aquello de resolver qué narices nos están diciendo los personajes gracias a las hilarantes traducciones googlerianas que hacía la compañía por aquella época. Siendo un juego de lucha no es que su trama tenga un especial peso para el desarrollo del juego, pero sí es de agradecer el mimo que SNK puso en esta entrega, hilvanando y encajando todos los combates en una búsqueda para unos pergaminos ancestrales que sólo puede obtener el mejor luchador o algo así, no sé.
Y es en la forma de jugar donde Fatal Fury mete un subidón de calidad de aúpa, pasando de la jugabilidad más acartonada y rígida de los anteriores títulos a un estilo de juego mucho más fluido y orgánico. Los personajes se mueven con mucha más soltura por la pantalla, responden mejor, sus ataques se realizan con más facilidad y en general el lavado de cara gráfico les sienta de maravilla, ganando todos en sus sprites mucha más contundencia y presencia. Además, la saga presenta una novedad y es que los dos planos de juego que eran seña de identidad de la saga se modifican para pasar a tres planos, uno central, uno interior y otro exterior a los que se puede pasar momentáneamente para esquivar ataques y contraatacar. La permanencia en estos planos, además, se limita en el tiempo y ya no podemos pasar en ellos todo el rato que queramos como en los anteriores capítulos, así, al poco de cambiar de disposición nuestro personaje volverá a la central. Este simple cambio hace que el juego gane una profundidad de la que carecían los anteriores añadiendo la estrategia y el juego mental de ¿Cúando cambiar de plano?¿Cuándo esquivar?¿Cuando contraatacar? Para no hacer estos cambios de plano totalmente gratuitos, además, cada luchador cuenta con golpes que pueden devolver al rival al plano central de juego haciendo que la huida y esquiva no sea totalmente gratuita si no algo que hay que saber realizar en el momento apropiado. Además, esta entrega incluye otras novedades como la valoración de cada uno de los combates que realicemos que repercutirá en si vemos el verdadero final o no o el poder realizar dependiendo de nuestra posición en el escenario unos pequeños fatalities al ejecutar el último golpe al rival, enviándolo al agua, contra la pared o, lo más espectacular, enviándolo hacia la pantalla en un zoom como los que Neo Geo sabía realizar.
Fatal Fury 3 es el punto de inflexión de la saga, de cuando los juegos de la serie pasaron de ser títulos nomalitos y basados en rutinas aburridas para vencer al contrario a ser divertidos, dinámicos y fluidos con muchas más opciones de combate y más profundidad. Independientemente de esto, Fatal Fury 3 es, además, el capítulo que presenta mejor apartado artístico de toda la saga, escenarios muy cuidados y que rebosan preciosimo y detallismo al máximo, personajes grandes y robustos, gran presentación del juego y todo coronado por una banda sonora genial. Cualquier fan de la saga debiera tener, sin lugar a dudas una copia de Fatal fury 3 en su colección.
Lo mejor:
-Presentación y apartado gráfico, muy cuidado y detallado, le da mil vueltas a las anteriores entregas de la saga, que ya eran, de por sí, bastante vistosas.
-La jugabilidad está muy mejorada, ha metido un subidón respecto a entregas anteriores, gracias a la mejor animación y fluidez y a la modificación de los diferentes planos de lucha, que lo hacen más rápido y estratégico.
-La banda sonora, sea en cartucho o en versión CD.
-La forma de narrar la historia y el incentivo de tener varios finales dependiendo de nuestra habilidad.
-Es un juego de Neo Geo bastante asequible, sea el formato en el que sea.
Lo peor:
-Como venía siendo costumbre en SNK, su traducción al castellano deja que desear.
-Los tiempos de carga pueden hacerse algo pesados.
-El cabrón de Hon-Fu se me atraganta más que el jefe final.
-Que la versión de Sega Saturn no saliese en Occidente y que, además, la versión japonesa dé problemas de compatibilidad si se usa con un ST-Key.
NOTA: 9
buen analisis ...ami tambien me deja con una buena sensacion la musica del juego ,
ResponderEliminarademas de los escenarios expectaculares.... al parecer SNK en el año 95 le puso empeño con todos sus juegos en cuanto a la musica y graficos.....el kof del mismo año por ejemplo su musica y escenarios son lo maximo (aunque la jugabilidad es un poquito mala) para mi los mejores de la saga kof!!! otro por mencionar es samuray showdown 3 por lo mismo y sin lugar a duda el Fatal fury 3 !!